Hace unos meses fue condenada la Guardia Civil por llevar ficheros ilegales e inexactos.
Nuestro Presidente , después de años de lucha, logró obtener documentos de la propia DGGC, en los que quedó patente la falsedad e ilegalidad de las bases de datos existentes en la Institución, y especialmente las anotaciones policiales sobre los denominados sindicalistas del Cuerpo; después de mucho luchar se logró demostrar que las fichas policiales que generó el Cuerpo y el Ministerio eran falsas y contravenían la Ley, con datos falsos con ánimo de perjudicar la imagen de los Guardias civiles que solicitaban derechos constitucionales. La Agencia de Protección de Datos condenó a la DGGC, y ordenó dar acceso a los datos y cancelar los mismos por ser falsos, inexactos y por no estar sometidos al control legal oportuno.
Todo esto , lógicamente se tuvo que producir con el apoyo de guardias civiles de base que se han encargado de inflintarse y propagar datos falsos contra sus propios compañeros, lo que demuestra la falta de conciencia y de escrúpulos de los que a pie de calle debía de estar con nosotros apoyando sus derechos humanos, y que ahora aparecen como abanderados de los derechos democráticos.
Este es un claro ejemplo de cómo obran algunos para desprestigiar a los destacados activistas en pro de los derechos humanos, sembrando mentiras y pruebas falsas, como quedó demostrado con la sentencia de la APD; muchos son los que sin saberlo han tenido y tienen en su ficha policial anotaciones de hechos que no han cometido nunca; lo que le pasó a nuestro Presidente montando anotaciones falsas, cuando en su historial policial y penal era una hoja intachable al no ser condenado nunca, llegando a constar Delitos de Sedición Militar.
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